Cada uno que entra.
Como si cada uno que hubiese pasado por acá, hubiese quedado atrapado ahí.
cada uno que entra siente que todo es más grande de lo que parece, la ilusión óptica funciona con excelencia.
la anfitriona sabe como crear el ambiente, maneja la situación con seguridad porque ese objeto gigantesco posibilita la capacidad de autoconocimiento. sabe llevarlo a cabo como ninguna.
cada persona que entra, logra esa conexión sublime, una experiencia para conocer mas a fondo la propia psicología.
es ella quien va guiando a ese viaje interior con las pócimas de sus melodias.
y ahora están todos ellos ahí, esperando a que la empiria venga a buscar su idea, su reflejo.
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